M. Segovia se para en el borde de la tarima y, agitando la lista del curso frente a sus ojos, exclama:
Volontiers? Todos se esconden detrás del libro, uno levanta la mano.
Allez, M. Rathgeb (pronunciado con acento en la e).
Lisez!
Lee espectacularmente.
M. Segovia, mueve un dedo, dos dedos y tres dedos; mientras con cara impasible va diciendo: une minute, deux minutes, trois minutes. Y finalmente el lector recibe el ansiado anuncio: Zéro faut!! Asseyez-vous, s’il vous plait.
Genial el hallazgo de nuestro antiguo dolor de cabezas: "El francés de Monsieur Segovia y su librito de lectura personal".
ResponderEliminarEl ejemplo es malo ya que Rathgeb nunca sacó ZERO FAULT!!!!